Porqué blogs al interior de las empresas

Frases como las siguientes me motivan a la reflexión que viene mas adelante:

- “El lenguaje”, nos dice Heidegger, “es la morada del ser”
- “Todo lenguaje”, nos dice Wittgenstein, “expresa una particular forma de vida”
- Hemos perdido el sentido de lo que hacemos, la ilusión de servir a otros. Trabajamos porque hay que ganar dinero para vivir.

Extraidas de entrevistas a Rafael Echeverría y Julio Olaya, presentes en el blog "Conexiones" de Mauricio Bertero y a los cuales llegué gracias a este post de Raúl Herrera.

Nos relacionamos unos con otros en función de la idea que tenemos de quien es el otro. Los blogs enriquecen, en general, la idea que tenemos del otro. Lo vemos en una dimensión mas amplia, mas rica. Al vernos en forma mas rica, incorporamos mas elementos del plano emocional en la interacción. El otro ya no es un simple eslabón del hacer de las líneas de procesos en las que me toca tomar parte. El otro es todo un ser lleno de matices e instancias emocionales. Ver al otro a partir de las conversaciones en que participa, de la emociones que pone en ellas, enriquece mi mirada de él. Empiezo a sintonizar con otros desde planos más afectivos, más en la dimensión del amigo, que desde el conocido, util a mis fines o intereses.

Las empresas necesitan más a personas y menos recursos humanos intercambiables. Esto para empezar, por el foco mucho más puesto en el cliente, lo que requiere que sea capaz de tomar decisiones compometidas y creativas. Además, que las empresas necesitan estar inventándose cada vez con más frecuencia y para ello necesitan la participación creativa de mas y mas gente de dentro de la organización.

Necesitamos aparecer más, implicarnos más, disfrutar más. En que emoción estamos, en que compromiso con el equipo con que trabajo, son piezas claves de la eficacia no solo económica del proceso laboral, sino existencial del sentido y el despliegue in extenso de todo el ser que somos.

Los blogs son un poderoso instrumento de construcción de identidad al interior de la organización, siempre y cuando se de el espacio de confianza, seguridad y acogida que las personas necesitan para atreverse a desplegar su ser en mayor grado.